lunes, 23 de febrero de 2015

PROFESORES PARA LA FELICIDAD

Hoy quiero rendir un homenaje a todos los chicos y chicas que han pasado por mi vida en calidad de maestros de la vida, de la felicidad, de la ternura, de la dulzura, de la nobleza, empezando por mis hijos, quisiera nombrarlos a todos, Andrés Fernando, José Fernando, Juan, Emilio, Antonio, Juan Juan, Ana  Lucia, Heliyajo, Benjamín, Jorge, Sarita, Paulina, Luisa Fernanda, Sarita,  Paulina, Kamila, Sofía, Felipe, Juan David, Diego Alejandro, Daniel, Jerónimo, Valeria, María Isabel, Santiago, Juanita, Daniela, Isabela, Ana Belén, Andrea, Shean, Rodrigo, Nicolás, a todos, sobrinos, nietos, vecinos, todos los chicos que están cerca de nosotros los adultos en diferentes momentos de la vida, y así como nosotros somos sus maestros con el ejemplo, ellos si que saben enseñar sobre la vida, tienen inmersa la pedagogía del amor, la ternura, la alegría, es la verdadera magia de la vida, la que guardan en sus corazones. 

Ellos los chicos son los auténticos cofres mágicos del amor; deberíamos saltar,
bailar y cantar llenos de alegría cuando hay un tesoro infantil cerca de nuestras vidas, deberíamos estar al pendiente para recoger de su magia todo el amor que nos llena de felicidad, para luego poder compartirla con el resto de los adultos; pues es de la sonrisa infantil, que tomamos la luz, de su voz aprendemos la melodía del amor con la música de la ternura, de sus miradas , el brillo mágico que nos hace inocentes y puros, de sus brazos el calor, de sus encantadores y fantásticos sueños, aprendemos la ilusión, y de sus corazones nos llega el amor, es como re-aprender los que olvidamos al hacernos adultos; es que en la compañía infantil recolectamos la magia necesaria para dejar salir el niño que llevamos dentro, con los niños todo en la vida cobra color y calor.

Ellos nos enseñan que todo es un motivo de celebración, asombro, y agradecimiento, ellos son una fuente inagotable de magia con cálidos corazones de niños. Desafortunadamente en muchas ocasiones se dejan pasar estas valiosas y magistrales enseñanzas, aún se ven papitos de ceño fruncido con las sonrisas escondidas para ganar respeto según ellos; con los chicos podemos recuperar las alas necesarias para soñar con la felicidad y vivir en ella y con ella. 

Los chicos son maestros especializados, apenas dan un abracito de ternura, derriten corazones, lo que pasa es que los adultos han ido perdiendo muchas de estas valiosas asignaturas, y a cambio se ensañan en devolver con golpes el derroche de amor que dan los hijos, y sí, suena duro pero aun existen adultos que golpean sus tesoros, los mutilan física y emocionalmente; que rico tomar un curso intensivo de amor con los chicos que están cerca. 

Podemos aprender bastante de los niños. Casi todos tenemos la fortuna de conocer de cerca la magia de la niñez veinte o treinta años después de haber sido niños. Si son nietos, se reciben aún más lecciones. Hay que dedicar más tiempo a aprender de los niños, y menos a enseñarles. Los niños saben pasarla bien, mucho más que la mayoría de los adultos. Los niños saben reír. No necesitan gran cosa para reírse. A veces no necesitan nada. Ellos ríen porque les agrada la sensación. Los niños son espontáneos. No analizan ni empeliculan las cosas. Simplemente se mantienen ocupados siendo ellos. 

Los niños siempre viven fascinados. Son curiosos. Una piedra, un escarabajo o
un charco, es una fuente de asombro para un niño. Todo es una experiencia nueva y emocionante. Los adultos se vuelven serios y dejan de entender de rocas, insectos, charcos y hormigas. Es que los adultos se olvidad cuan mágica es la vida.

Los niños aceptan abiertamente. No tienen prejuicios. Gustan de ricos o pobres, blanco o negro. Los niños no se escandalizan por ideas políticas o religiosas. A los niños no les preocupa demasiado bañarse o no bañarse. ¿Cuándo hemos oído a los niños quejarse del clima? No lo hacen. Saben por intuición que tienen que adaptarse al curso de las cosas. A todos petrifica y deleita la honestidad de los niños, ¿Por qué estás tan viejo?, ¿Ya te vas a morir? ¿Por qué le pegas a la mesa? Su perseverancia es digna de admirarse y soportarse. Si los vendedores de seguros se capacitaran en un jardín de niños, ¡probablemente el noventa y ocho por ciento no claudicarían en los primeros doce meses! Sencillamente, los niños perseveran. 

Hoy Caricias Calientitas tiene la intención y el propósito, de sensibilizar con unas palabras y un video para que los papitos se dejen envolver por la magia de la ternura y la dulzura que les dan sus hijos a cada instante, y que de paso dejen salir el niño que llevan dentro, es volver a creer en los ángeles, hadas, unicornios; es hacer la maestría del amor personalizada! 

Con Caricias Calientitas.

martes, 17 de febrero de 2015

ENSEÑANZAS PARA LA FELICIDAD

Desde la dulce espera hasta los seis primeros años de vida tiene lugar en el ser humano un desarrollo físico y cognitivo, que se potencia a través de la cultura. El cuidado y afecto de los papitos, mamitas, familiares, cuidadores y adultos significativos es indispensable para la supervivencia de los niños y niñas, y para desarrollar un sano ambiente que le permita adquirir y aprender habilidades para desenvolverse en su medio y por sobre todo ser Feliz!

La crianza con amor, bondad, respeto, jamás será sinónimo de “permisividad”, vale la pena hacer esta aclaración, porque se está confundiendo la crianza con amor para la felicidad con la crianza permisiva e incluso negligente.

Hay un refrán o proverbio que dice, “hay que ponerse en los zapatos ajenos para
comprender”, igual con los niños, colocarse en su lugar, dejarlo jugar, mancharse, llorar y desahogarse, dejarlo correr, probar y caerse, respetarlo y hablarle con respeto, amabilidad dulzura, etc. El chico no está reñido con las normas de convivencia de la sociedad ni con los famosos “límites” que tantos pregona, está viviendo su infancia primera. Caricias calientitas defiende a capa y espada la crianza con amor y la importancia del afecto en la educación para felicidad de los niños y niñas; obviamente estos comportamientos afectuoso son objeto de críticas familiares, sociales e incluso escolares, precisamente porque aun se confunde la crianza con amor con la permisividad, y si los niños necesitan normas, limites pero con amor!

Existen dos maneras bien diferentes de “permitirles” a los hijos hacer algo: desde la comunicación, la mirada, la presencia paterna que respeta sus necesidades, su condición de niño y su personalidad; o desde la ausencia, desde la ignorancia, desde la pereza, la comodidad o la negligencia de los papitos, que simplemente “pasan” de sus hijos, no los escuchan ni los conocen, no pasan tiempo con ellos, y por tanto, tampoco los respetan, simplemente los ignoran. Es importante hacer esta distinción para incautos, la crianza con amor para la felicidad, se basa en el afecto, la mirada, la empatía, el tiempo dedicado y realmente compartido con los hijos. Educar es acompañar. Con coherencia, con criterio, con creatividad, con alegría, con cariño y con respeto por el niño pequeño.

Eso es bien diferente de la familia “permisiva” donde los niños permanecen solos una gran parte del tiempo, haciendo lo que quieren, “entretenidos” para no “molestar” al adulto; donde unas veces son regañados o reciben gritos o golpes cuando sus papitos están enojados, o de mal humor, y otras son consentidos o se les permite hacer lo que quieran siempre que “no molesten”; donde se cambian el tiempo, la presencia y la atención por regalos y objetos materiales; donde los papitos están en el bar o fumando un cigarrito mientras los niños juegan solos todas las tardes en el mismo parque; donde los niños se crían solos sin apoyo y sin sostén emocional; donde no hay coherencia ni criterio educativo; donde los papitos, ya sea por trabajo, por inconsciencia, por pereza o por falta de recursos materiales, intelectuales y emocionales, permanecen ajenos a las auténticas necesidades del niño, y este sigue siendo huérfano de mirada, contacto y atención… Más que de educación permisiva, parece más adecuado hablar en este caso de educación negligente, o incluso de no educación, simplemente abandono. 

El presente frente a la crianza de los niños, está contaminado por el conductismo, sin embargo, existen estudios científicos profundos, en los afectos y las emociones y en la comprensión de la primera infancia, que demuestran que el amor es el pilar fundamental en la crianza para la felicidad desde la autonomía y respeto por la diferencia.

Tampoco llegar a los extremos, simplemente es comprender la importancia que tiene la primera infancia, que es y ha sido completamente ignorada por las posturas “oficiales”, que aún hoy siguen defendiendo más que nunca como la gran victoria de la “igualdad” que propone “abandonar” las criaturas en escuelas infantiles a las 16 semanas de vida. Es darle el lugar que merece a la primera infancia, pues cada etapa se construye sobre la base de la anterior. Y si no ha sido, no importa, nunca es tarde para comenzar a respetar y a construir una relación con los hijos basada en la sinceridad, el afecto, la comunicación y la presencia, la amabilidad, el respeto.

Y ni mas faltaba que se trate de culpabilizar a las mamitas, si se culpabiliza a alguien, es en todo caso a la sociedad en su conjunto que no apoya ni prestigia a las mamitas ni a la maternidad, que está exclusivamente enfocada en la producción y no en la re-producción, que hace invisible todo lo que se sale de los circuitos de la producción y el consumo, que no invierte recursos en apoyar la primera crianza de los bebés en manos de sus propias familias, y mucho menos tiene en cuenta las necesidades afectivas de los niños pequeños.

Pareciera que implementan una teoría absurda: el niño se educará bien a sí
mismo si lo dejamos solo. Los principios de la crianza con amor se basan precisamente en la defensa crucial del afecto, de la corporalidad materna para los bebés, de la importancia de la presencia maternal y paternal a lo largo de toda la infancia y la adolescencia de los hijos. Los seres humanos no son innatamente buenos ni innatamente malos, la interacción con el entorno es lo que los convierte en una cosa u otra.

El pilar fundamental de la crianza amorosa y respetuosa es la empatía con los niños, la verdadera empatía por sus necesidades y también el conocimiento de lo que realmente necesitan los bebés humanos para su desarrollo emocional. Muchos de los conceptos que promueve la crianza con amor pueden parecer raros, obsoletos o exóticos, por eso es importante asimilar menudito para que se comprenda bien algo fundamental: lo verdaderamente importante es el bienestar del hijo, hay situaciones que la crianza con amor considera básicas pero como ya se sabe, cada familia es un mundo y cada bebé una personita individual con sus gustos, apegos, emociones, etc.

La crianza respetuosa debe despojarse un poco y paulatinamente de todas las imposiciones culturales con las cuales se convive a diario, por ejemplo siempre hay algún “metido” que dice: ¿Tan grande y todavía toma pecho? Ya va siendo hora de que lo destetes. ¿Y cuándo lo vas a sacar de tu pieza? Si no lo ponen a dormir en su habitación se mal acostumbra y después no lo sacan con nada. No lo cargues que se acostumbra a estar en brazos. Es mejor una palmadita a tiempo. ¡Los niños son muy manipuladores! Estas frases y otras similares nos son dichas a diario a los papitos que cometen tamaños errores con los hijos y dejan que duerman en su habitación, los cargan mucho, jamás les pegan, les permiten seguir al pecho cuando están “mayorcitos” -a propósito, ¿qué mente iluminada; dijo alguna vez cuándo son “demasiado mayorcitos” para tomar pecho? y acuden inmediatamente cada vez que los reclaman. Pues bien, a donde quiero llegar es aquí: todas esas creencias son elaboraciones culturales que van surgiendo con el tiempo casi sin que lo advirtamos, son prejuicios invasores, están por todas partes y lo común es que jamás los papitos se toman el tiempo de sentarse a pensar un poco si tienen algún sentido, si son ciertas, si contradicen el instinto y lo más importante si coinciden con la naturaleza de su hijo.

En la crianza con amor hay que apostar por el respeto. El amor no conoce “términos medios”, aunque cada uno ve el “centro” según la cantidad y calidad de los afectos que haya recibido en su propia vida. Es una forma de entender la educación infantil que ha tenido muy pocos antecedentes -escritos- en la historia de la sociedad occidental hasta hoy día. Es criar y educar desde el amor profundo, que comienza desde la dulce espera, en la importancia del continuum con el cuerpo de la mamita en los primeros meses del recién nacido, continúa con la identificación emocional en los primeros años, y sigue con la comunicación profunda toda la vida.

El amor expresado desde la dulce espera, demuestra que cuando el niño o la niña nacen, ya tienen un pasado de nueve meses amoroso, cálido. Los papitos deben ser conscientes de: las necesidades de contacto físico de sus niños, de la importancia de aceptar sus emociones sin juzgarlos y aceptando la expresión de sus sentimientos, la confianza que deben depositar en sus habilidades, la importancia de conocer sus ritmos de aprendizaje, la importancia de la motivación, la calidad y dedicación de tiempo que deben brindarles, al igual que la autonomía que deben adquirir para que resuelvan sus propios conflictos. Como quien dice: SI a la Crianza con Amor y Respeto! NO al Castigo físico y trato humillante!
Con Caricias Calientitas

viernes, 13 de febrero de 2015

ULTRASONIDOS PARA LA FELICIDAD

La ecografía, también llamada ultrasonido, fue utilizada por primera vez durante la segunda guerra mundial para la detección de submarinos. Años después se descubrió que la misma tecnología podía servir pera observar al feto dentro del útero y estudiar su crecimiento y bienestar, además sirve para confirmar la dulce espera y la ubicación intra o extrauterina, igualmente es una herramienta importante para controlar el desarrollo normal del bebé, estimar su peso y también muestra donde está implantada la placenta. Es un procedimiento ampliamente utilizado en el embarazo normal y es sumamente útil en embarazos complicados por alguna enfermedad. Y hablando de amor, ternura, fe, esperanza, es un contacto con el bebé, ya que se puede ver y escuchar los latidos desde la sexta o séptima semana de gestación. Es emocionante, conmovedor, apasionante, excitante ver al bebé moviéndose en la pantalla, mucho antes de que la mamita sienta sus movimientos realmente. Este método también permite diagnosticar el sexo tempranamente.

Por su puesto descartadas las complicaciones lo que resulta arrollador es saber el
sexo del bebé; motivo suficiente para soñar mas exactamente, cuarto, ropa, nombre, y lo mas importante se puede empezar una comunicación mas exacta a través de las caricias, llamarlo por su nombre, cantarle con su nombre, y soñarlo feliz, sano, triunfador. Algunos papitos se preocupan porque hay rumores bajitos sobre los efectos de la ecografía en la formación del bebé; pues a la fecha no se conocen efectos adversa para el bebé o para la mamita, como todo en la vida no se debe abusar y realizarse solo las necesarias? Deberían realizarse tres ecografías durante un embarazo sin complicaciones. La primera entre las 6 y 12 semanas para el diagnóstico de embarazo, la segunda entre las 16 y las 20 semanas para el diagnóstico de malformaciones fetales y la tercera luego de las 32 semanas para controlar el crecimiento fetal.

Desde siempre, el primer momento en que se sabe de la existencia de un aparece la curiosidad de saber el sexo del bebé, antiguamente no era una tarea fácil, además giraba en torno a muchos, mitos, como la forma de la pancita, si la mamita tenia agrieras o no, hacía pruebas con tenedores y cucharas, los antojos, en cambio hoy es esperar unos días un tiempo prudencial y la ecografía como un hada mágica resuelve la pregunta; también existe un fuerte tendencia en Europa por no saber el sexo del bebé, se ve de todo. El método más efectivo para poder saberlo es acudir al técnico en ecografías entre la semana 16 a la semana 20, es decir antes de cumplir los cinco meses para determinar el sexo.

Esta situación puede variar, ya que el tiempo dependerá si es que el bebé se encuentra tapándose los genitales durante el examen. En algunos casos, es importante saber el sexo del bebé, por ejemplo en los casos en que el bebé está atravesando por riesgos de ciertas enfermedades congénitas.

Caricias Calientitas invita a las mamitas a apostarle a la ecografía emocional,
incluso hoy en día ya se habla de la ecografía emocional; diferente, su objetivo es acercar lo máximo posible la imagen del bebé y su vida dentro de la casita de agua en la pancita de la mamita, se trata de fortalecer el lazo afectivo que los une y que debe ir en aumento con el embarazo y tras el parto. La ecografía emocional permite a los demás miembros de la familia conocer al nuevo miembro, su cara, sus gestos, antes de nacer, acrecentando la ilusión de la dulce espera y adelantando el vínculo que los une para siempre, la ecografía emocional le permite a los papitos soñar en colores, experimentar sensaciones extraordinarias, asombrosas, milagrosas, fabulosas, fantásticas, una mágica forma de incidir en el estado emocional de ese nuevo ser, semilla de amor y para la mamita representad, paz, serenidad, bondad, como quien dice la ecografía emocional la lidera la mamita con su actitud!

Pareciera que un tema como la ecografía nada tiene que ver con la felicidad, pues todo lo que toca a los niños desde su concepción es vital para sembrar la felicidad en su vida, pues todos los detalles médicos, afectivos, logísticos, nutricionales son medios para abonar la felicidad que se merecen nuestros mayores tesoros. Es como soltar muchas palomas blancas y globos de colores, que se eleven al cielo con voces auténticas, claras, llenas de ilusión por tener un bebé para amar y adorar, que el corazón palpite al ritmo de la ternura y la dulzura de ese precioso bebé.


Con Caricias Calientitas


domingo, 8 de febrero de 2015

EMBARAZO PARA LA FELICIDAD

Hoy con un tema dedicado  a  mis  queridos  nuevos  y  felices  papitos  Lina  y Erick, un  tema que inquieta a toda madre gestante, ¿Qué esta pasando con el bebé, qué se le esta formando? Bueno una pasadilla por meses:

PRIMER MES: Los 9 meses del embarazo se calculan desde el primer día de la última regla. El óvulo mas o menos se encuentra con el espermatozoide el día catorce, e inmediatamente el ovulo queda fecundado. A los 6 días después del feliz encuentro la fecundación, se convierte en un compuesto de células que se acomoda en el útero.  

Entonces los 23 cromosomas del óvulo y los 23 cromosomas del espermatozoide se unen, y aquí queda el sexo definido; y la mamita empieza a sentir algunas sensaciones extrañas, nauseas, el olor de algunos alimentos no le gusta, sus senos se vuelven mas sensibles. La placenta comienza a formarse, igualmente el embrión y el archi famoso liquido amniótico. Para el bebé esta etapa es crítica, pues esta débil, su corazoncito late 65 veces por minuto, por eso la mamita debe alimentarse con sumo cuidado y una dieta balanceada, ya que en esta época es cuando aparecen las malformaciones.

SEGUNDO MES: En este momento empieza la formación de la medula espinal
y el cerebro y sus células crecen rápidamente, cerebro que continúa desarrollándose hasta los 18 meses de vida. Aparecen la orejitas, la mamita ya no tiene menstruación y sus senos se aumentan un poquito, y en ocasiones se sienten medio adoloridos. La cabecita y el tronco empiezan su periodo de formación, se pueden ver los que serán piernas y bracitos, también la boquita toma forma y se entran las raíces de los dientes. El bebé es como un frijolito mágico; la mamita, le da sueño, ganas de hacer chichí con mas frecuencia, la mamita esta feliz porque espera un bebé, fruto del amor.

El corazón del bebé se resguarda en el tronco y al finalizar este mes sus bracitos y piernas son mas evidentes el bebé mide mas o menos un centímetro de largo. Igualmente sus ojitos se comienzan a pincelar como el borde de orejitas también, los hoyuelos de su naricita, y entra al tercer mes con 2,5 centímetros y mamita con su felicidad supera cualquier trastorno, obviamente con la amorosa compañía del papá. 

TERCER MES: Ya tiene nombre se llama feto, y llega aquí la dulce sensación para la mamita y los que esperan al bebé, ya se mueve suavemente, aunque algunas mamitas no perciben el movimiento por suave, las rodillas ya comienzan a formarse, y los órganos principales, como los pulmones, los riñones y el hígado, hacen su aparición triunfal; los huesitos comienzan a tener forma; mientras la mamita empieza a engordar o mas bien a sentirse gorda, algunas ya utilizan ropa de maternidad aunque pudiera no hacer falta, pero es esa gana de gritarle al mundo ¡estoy embarazada!. La placenta comienza muy juiciosa hacer la tarea, el bebé se vuelve cabezón, pues el tamaño de la cabecita es la mitad de su tamaño total, los riñones también hacen su tarea y el bebé ya hace chichí, ese chichí se va al liquido amniótico que rodea al bebé y que a su vez lo protege de los golpes que pueden causar choques y caídas. La mamita se compra brasier mas grande, Y claro su cabeza reclama al cuello y este viene pausadamente a instalarse, tiene parpados el bebé pero cerrados; ahora ya no parece un frijolito, ahora parece un huevo por su tamaño, pesa 15 gramos; y entra al cuarto mes con los ojitos bien separados y la cabecita se redondea poco a poco, las orejas quedan instaladas a ambos lados de la cabeza, ya parece mas un bebé que un feto y la mamita se le abre el apetito, siente el crecimiento en su útero, y la emoción la lleva a tejer, bordar, pintar el ajuar de su bebé.

CUARTO MES: Pues inicia la segunda fase de la dulce espera, es una etapa agradable, la mamita empieza a redondearse, es el momento de tejer sueños en compañía, en pareja, ya el bebé es bebé, solo que en miniatura, ya se sabe el sexo, motivo de doble inspiración para los sueños y la construcción de su mundo, su bienvenida. 

Hora de comprar cepillo, pues el bebé tiene pelo en la cabecita y en las cejas, los latidos del corazón se escuchan con un monitor especializado. El feto bebe líquido amniótico y ya lo orina. Comienza su fase de cantante, las cuerdas vocales se forman, y se ata al abdomen con su cordón umbilical; la mamita tiene una toronja pues a esa fruta se asemeja el tamaño del útero, la mamita debe consumir alimentos ricos en hierro y ácido fólico. El bebé crece ya mide mas o menos 15 centímetros de largo y pesa 120 gramos, es tan pequeñito que podría caber en una taza de café, la succión como reflejo aparece aunque débil; la mamita mientras tanto se acalora, y siente la necesidad de descansar sus piernas, además siente sed con frecuencia. Para entrar al quinto mes el bebé está cubierto de pelo fino llamado “lanugo”, sus uñitas aparecen como una fantasía.

QUINTO MES El bebé sigue creciendo, sus características comienzan a definirse, ya tiene huellas digitales, y el útero se acerca al nivel del ombligo. Y algo increíble sucede, el bebé comienza a chupar dedo, el pulgar es su preferido, y bebe líquido amniótico, lo cual es normal. Ya alcanza los 20 centímetros y pesa alrededor de 300 gramos. La mamita experimenta secreciones vaginales normales, pero anormal es si presenta picazón o éstas tengan un fuerte y desagradable olor. Aparece el vernix una sustancia sebácea que protege al bebé del líquido. En este mes la mamá si siente los movimientos de su bebé, y el papito también colocando la mano en el vientre de la madre, es como una sensación de mariposas o burbujas en el estómago. Se aproxima el sexto mes el bebé se entona con 23-25 centímetros como quien dice, la mitad del tamaño que tendrá al nacer. A la mamita el ombligo se sale un poco, los senos los tiene pesados, pero feliz con su apariencia de embarazada.

SEXTO MES. El bebé se mueve como pez en el agua, la mamita puede presentar
agrieras o acidez, sobre todo en la noche, antes de acostarse. Una posible solución consiste en comer poco y con mayor frecuencia. La mamita embarazada debe aumentar por lo menos medio kilo por semana de ahora en adelante. El feto tambien duerme y alterna sus periodos con actividad, para este momento el bebé es influenciable por factores externos, música, que la mamita se baña, en fin es un bebé bien avispado. Es importante que la mamita cuide sus dientes y su peso como quien dice acuda a su médico porque en esta etapa la mamá gana mayor peso que en los meses anteriores. El bebé cierra sus manitos, mide 33 centímetros y pesa aproximadamente 750 gramos.

SÉPTIMO MES: La tercera fase del embarazo se cuenta a partir de este mes, el bebé tiene patrones establecidos de sueño y actividad, increíble parece pero el bebé es capaz de diferenciar entre la luz y la oscuridad por la pared abdominal. El bebé ha alcanzado dos tercios del tamaño que tendrá al nacer, otra actividad sorprendente del bebé, puede diferenciar entre sabores dulces o ácidos. Da pataditas con su “gran fuerza”, puede sonreír y bostezar, pesa aproximadamente 1.8 kilogramos. La mamita siente que se le acaba el aire al subir escaleras, se despierta varias veces en la noche para ir al baño. Comienza a sentir más calor. Los huesos del bebé se vuelven mas duros, proceso que continuará durante 16 años más, ya responde al dolor, la mamita sentirá calambres fuertes, para este momento la mamita debe iniciar su curso prenatal, la piel del bebé se hace mas resistente, el meconio se empieza a formar en los intestinos y se evacuará en los primeros días de vida extrauterina, la mamita otra vez muy atenta con una nutrición balanceada y adecuada.

OCTAVO MES: El bebé abre sus ojitos, pone a funcionar los parpados, diferencia olores, el bebé está feliz en este mundo materno. La mamita no debe estar de pie por largos periodos, pues la aparición de várices en las piernas no se haría esperar; de la madre, al bebé le puede dar hipo al bebé; y la mamita lo percibe como espasmos rítmicos en el abdomen, también aparece el calostro, es posible que sus tobillos se hinchen, los huesos pélvicos, e incluso la espalda, podrían dolerle, la mamita en definitiva debe mantener siempre una buena postura. El bebé, tiene su canal digestivo y sus pulmones casi listos. La piel ya no está tan arrugada y roja. El bebé comienza a preparar para su vida extrauterina almacenando hierro en su hígado, también percibe el sol cuando su mamá está asoleándose. Mide unos 40 centímetros de largo y pesa 2.5 kilogramos. El cerebro crece notablemente. Toma postura para el parto y la mamita aumenta su dosis de felicidad porque ya casi nace su gran amor!

NOVENO MES: El bebé está terminando de desarrollar sus pulmones. Mide 45 centímetros y pesa 2.7 kilogramos. La mamita, puede sentir cambios, repentinos en su nivel de energía. El bebé podría nacer en este mes antes de las 40 semanas y no se consideraría prematuro, el líquido amniótico ha aumentado de una sola gota a un litro, ahora empieza a disminuir por falta de espacio. El bebé crece a ritmo acelerado, aumentando 15 gramos por día. Mide entre 50 y 52 centímetros y pesa de 3.2 a 3.6 kilogramos. La mamita debe practicar respiraciones de relajación y que vaya teniendo lista la maleta de la felicidad, que incluya la primera muda del bebé, y la ropa para la feliz mamá, el momento del parto se acerca y se debe estar preparado. 

Y ¡Bienvenido Bebé Feliz!

Con Caricias Calientitas

martes, 3 de febrero de 2015

ABUELAS PARA LA FELICIDAD

Las abuelitas son sinónimo de dulzura, sabiduría, ternura, paciencia, complicidad, caricias, delicias culinarias, pero cuando ellas son las encargadas de cuidar a los niños, jamás se le debe delegar como una responsabilidad de carácter obligatorio, pues un hijo es responsabilidad de los papitos. Las abuelitas según los papitos no tienen nada más que hacer que estar cuidando los nietos, pues aquí cabe recalcar que las abuelitas ya no tienen la suficiente energía para correr, saltar, en ocasiones las abuelitas tienen sobre peso y esto las impide para desplazarse con el niño en brazos, entonces aparece la inseguridad, una caída puede ser fatal para los dos.

Todos los niños deberían tener una abuelita, especialmente no ven televisión, porque ellas son las únicas que parecen tener tiempo para los niños. Vienen las confusiones por la ausencia de los papitos, especialmente por las largas jornadas laborales, y entonces muchos niños le dicen mamá a la abuelita. Es ventajoso que ellas sean las supervisoras de las cuidadoras, pues es alguien de confianza, y hay que decirlo, no los maltratan. Sin embargo, deben establecerse límites. Los psicólogos afirman que, por la experiencia y la autoridad se sienten con la potestad de participar en la crianza de los nietos. Las normas deben ser uniformes con respecto al hogar del pequeño, pues las abuelitas tienden a ser permisivas; es también aconsejable que los papitos pasen tiempo con sus hijos, para no delegar demasiadas funciones y decisiones en ella. Una manera de lograrlo es estar pendiente a lo largo del día. Es clave llamarlos varias veces desde la oficina y compartir tiempo a la llegada a casa.

Otro consejo para los papitos es ser considerados con la abuelita. Hoy en día se
conoce a través del libro: Síndrome de la abuela esclava, que a las abuelitas se les recargan tantas obligaciones, impropias para su edad, que terminan fatigadas y enfermas, con problemas físicos como mareos, decaimiento, dificultad para respirar, cansancio o caídas frecuentes, entre otros. Aunque su ayuda es fundamental, también debe tenérseles consideración, pues ya no está en sus manos el papel de la crianza. Las abuelitas no deben tomar grandes decisiones, ni encargarse de aspectos de la crianza que les corresponde a los papitos. Es posible que la abuelita no se queje y cuide de los nietos con diligencia, pero aparecerán manifestaciones físicas y emocionales que reflejen su cansancio. Es difícil diagnosticarlo, precisamente porque ellas quieren participar de las actividades con sus nietos. Lo ideal es buscar un equilibrio entre las responsabilidades y sus capacidades.

Abuelitas hay de todo tipo, desde las que consultan todo, todo, todo, antes de hacer (y entonces te llaman al trabajo unas 42 veces en la mañana para ver si le ponen la camiseta blanca o la celeste) hasta las que están absolutamente convencidas de que su verdad es la verdad. Lamentablemente, en muchos casos, esa verdad, era absolutamente válida hace 30 años atrás, pero no hoy día, o no para los papitos. Hay abuelitas que son muy valerosas en la vida de sus nietos, y como por lo general son bastante consentidoras y se toman el rol de salvadoras únicas cuando los papitos no complacen todos los antojos del pequeño, aparece un error frecuente que finalmente les quita autoridad a los papitos, y torna a los niños engreídos, caprichosos e intolerantes, actitudes que distan años luz de la felicidad. Debe quedar claro y establecido que la crianza de los hijos les compete exclusivamente a los papitos; si éstos por ocupaciones laborales no pueden dedicar el tiempo necesario a educar a sus hijos, entonces las abuelitas pueden cubrir esa ausencia temporalmente, concertando con los papitos sobre los modos, estilos y obligaciones que toda crianza demanda y nunca ejecutar lo contrario a lo establecido.

Los niños deben ir creciendo y conociendo a sus papitos en todos los aspectos de la vida, deben sentir su amor, sentirse disfrutados, jugar, cantar, con sus papitos, así se les esta permitiendo y fortaleciendo desarrollar con firmeza su autoconcepto, se fortalecen con el amor y se brinda así su sentido de pertenencia al grupo primario de apoyo que lo acoge con firmeza y afecto. Las abuelitas pueden colaborar y ayudar con su experiencia a los papitos trabajadores y novatos, pero con límites. 

Y aquí cuando la abuelita es la paterna, en ocasiones se crean relaciones difíciles entre la suegra y la nuera, es en estas circunstancias donde pueden surgir los conflictos; sobretodo si viven en casa de la abuela y ésta adopta el rol de la perseguidora con la esposa del hijo, critica su rol de ama de casa, porque "no lo atiende como debería, como yo lo atendía", y luego cuando nace el nieto, ingresan a cuestionar su rol de madre, apoyándose en que ellas han sido madres mucho antes y que saben las reglas de juego de la crianza infantil. Hay algunas abuelas que incluso recurren a métodos no honestos, como el decirle al niño que ella es la buena porque lo consiente y le da sus gustos y que la madre lo castiga (corrige) porque no tiene paciencia, de ese modo la abuelita gana el rol de la buena y la mamita el de la mala, en ese estado de cosas la guerra se declara, muchas incluso consiguen crear crisis entre los padres del niño, en estos casos mejor optar por una niñera, una guardería y la abuelita en espacios familiares.

Sucede también que hay abuelitas que quieren compensar con sus nietos, las
fallas cometidas con sus hijos cuando eran chicos, y ejecutan toda una serie de permisiones a los nietos, los sobrecargan ante sus demandas, no permiten que los corrijan y nunca les niegan nada; así los papitos van pasando a un segundo lugar, sobretodo porque los niños pequeños se guían más por el principio del placer; pero se les debe ir preparando para su ingreso al principio de la realidad y hay que recordar que en la vida real no siempre se puede obtener lo que se desea, de esa manera a los niños, complacidos en todo, no los entrenan para afrontar las frustraciones que muchas veces depara la vida, y al no estar preparados, van a sufrir y se van a decepcionar mas adelante.

Las abuelitas, que consientan, mimen, cuenten cuentos empitucados, canten nanas, acaricien, pero guardando las distancias en cuanto a crianza se refiere.

Con Caricias Calientitas.