miércoles, 27 de febrero de 2013

UN GEMELO PARA LA FELICIDAD


En el género humano, lo usual es tener los hijos de a uno, un embarazo de más de un embrión se lo considera fuera de lo habitual y está encuadrado dentro de los embarazos de alto riesgo, porque se apartan de lo normal. Esto no significa que tenga que complicarse siempre, en estas situaciones la felicidad es por partida doble.

La herencia por vía materna es un factor que predispone, también se ha demostrado que cuando la mujer se embaraza por primera vez después de los 30 años tiene mayores posibilidades de embarazos múltiples y se desconoce por cuál mecanismo se produce. Quedar embarazada luego de la toma de fármacos inductores de la ovulación, aumenta las posibilidades de embarazo múltiple. También quedar embarazada en el mes siguiente a la suspensión de anticonceptivos aumenta las viabilidades.

La feliz noticia se diagnostica porque el tamaño del útero es mucho mayor en los embarazos múltiples, y a veces la embarazada presenta muchos más síntomas de los habituales. Esto último se comprende sabiendo que dos placentas forman muchas más hormonas que una, y los síntomas se deben a las hormonas placentarias. Actualmente se realizan ecografías desde embarazos muy tempranos, motivo por el cual el diagnóstico es muy precoz. La preparación de los papitos es más ardua, pues todo debe ser por partida doble, porque es raro casi inusual que los papitos se enteren al momento del nacimiento; sin embargo los partos si suelen adelantarse. Los bebecitos al momento de nacer en muchos casos tiene peso bajo, que tiene su explicación, ya que deben compartir el flujo de alimentos que reciben del útero materno. Sin embargo tienen la característica que después del nacimiento aumentan de peso mucho más rápido que los recién nacidos que nacen con pesos acordes a su edad gestacional.

La gran mayoría de los embarazos gemelares producen dos bebés sanos, pero las posibilidades de un aborto es algo mayor en este tipo de embarazo que en el de un solo bebé, posiblemente debido a la mayor presión que sufre el cuello uterino o cérvix. Otra causa posible de aborto espontáneo son las anomalías fetales, más comunes en los embarazos múltiples. 

El periodo de gestación completa para un solo bebé es 40 semanas, pero en el caso de los gemelos, 37 semanas se considera un embarazo a término, en que los bebés llegan antes de lo esperado, es uno de los principales riesgos que se asocian con el embarazo múltiple. Casi la mitad de los embarazos gemelares concluyen antes de las 37 semanas, pero existen diferencias en el grado de riesgo que corren los bebés nacidos prematuramente, dependiendo de cuándo nacen. Los bebés con mayor riesgo son los nacidos antes de las 28 semanas. 

Las posibilidades de desarrollar complicaciones del embarazo como preeclampsia, desprendimiento prematuro de la placenta (cuando la placenta se separa de la pared del útero antes de que se produzca el nacimiento) y crecimiento intrauterino retardado (cuando los bebés no crecen como deberían) son también mayores en las mujeres que esperan más de un bebé. El índice de partos en los que nace el niño sin vida es también más alto en el caso de los embarazos múltiples (16 a 17 por 1.000, comparado con un 6 por 1.000 en el caso de embarazos de un solo niño). 

A veces hay tristeza por la pérdida de un gemelo durante el primer trimestre del embarazo no parece afectar al desarrollo del otro bebé. El organismo materno reabsorbe el feto que ha dejado de vivir. Este fenómeno, conocido como "síndrome del gemelo evanescente)", manifiesta pocos o ningún síntoma. Esto no significa que la mamita no sentirá desconsuelo, porque habrá pasado varias semanas imaginándose  que tendría gemelos y ahora se sentirá triste porque no se han cumplido sus expectativas. 

Si uno de los gemelos fallece en el útero durante el segundo o tercer trimestre del embarazo, todavía es demasiado pronto para que el otro gemelo pueda sobrevivir fuera del útero, así que el embarazo debe continuar durante días e incluso semanas. Un seguimiento médico de la mamita  y del bebé superviviente puede detectar cualquier anomalía en lo que resta de embarazo. Si la supervivencia del segundo gemelo se complica, es posible que necesite nacer antes de llegar a término. La mayoría de los bebés cuyo hermano gemelo falleció en el útero durante el segundo o tercer trimestre nacen saludables. 

A algunos papitos les aflige la idea de que uno de los gemelos que ha muerto se encuentra dentro del útero junto al gemelo superviviente. A otros, en cambio, esa idea les proporciona cierto alivio. El equipo médico  puede ayudar  a planear el nacimiento para respetar la pérdida y atender las necesidades médicas del bebé  superviviente a la vez. 

Muchos papitos  querrán saber si sus bebés del mismo sexo eran idénticos, esta información no solamente es importante para crear recuerdos del bebé que murió, sino para consejería genética, en caso de futuros embarazos. 

Para un papito o una mamita, cada gemelo o trillizo de un embarazo múltiple es único. Pero cuando pierden uno de los bebés, antes, durante o después del nacimiento, no siempre reciben el mismo grado de compasión por parte de otras personas. Si uno o alguno de los otros bebés sobrevive, la familia y los amigos tienden a concentrarse en el bebé superviviente y esperan que ellos los papitos hagan lo mismo. Sin embargo, el  dolor por la pérdida se produce a dos niveles: la pérdida de un bebé y la pérdida de un tipo de maternidad o paternidad únicas. 

La interacción con el medio también es muy importante para el desarrollo de la felicidad del bebé superviviente,  la gran misión de los padres es entender que ahora un motivo de celebración,  un bebé viene en camino,  el tener un gemelo significa mucho más que tener dos bebés al mismo tiempo, y es un reto que va más allá de tener doblemente trabajo y gratificaciones, es amor, ternura, dulzura, juego, mimos, caricias y la paciencia hay que fortalecerla. Ahora con este equipaje y una pizca de esperanza, rociada con mucha alegría a seguir la dulce tarea de educar con amor para la felicidad.

Con Caricias Calientitas
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lunes, 25 de febrero de 2013

INSINUACIONES PARA LA FELICIDAD


Estas insinuaciones  están basadas en la cotidianidad tanto de los papitos como de los hijos, lo único que pretende Caricias Calientitas, es promover un trato adecuado, amable, respetuoso, como quien dice una educación para felicidad, desde la autonomía y el respeto por la diferencia, es decir modales armónicos con el entorno.

En este orden de ideas desde que se nace y durante la primera infancia se debería: Estimular la exploración con todos los sentidos, en lugares familiares y nuevos, solos o con los demás, con cuidado y disfrute, explicar clara y amablemente sobre las habilidades básicas, explicándole el qué y el cuándo, qué es dentro y qué es fuera y el cómo funcionan las personas y las cosas; celebrar sus avances para aprender nuevas habilidades, pequeñas y grandes y su capacidad de ser único e individual, ser ejemplo para desarrollar nuevas habilidades, demostrándoles cómo practicar cada vez, de igual y diferentes maneras, con gente y con cosas nuevas.

Hay situaciones como la desaprobación inadecuada, las burlas, las negligencias, o los castigos y esos momentos demandan protección, porque para nada resulta constructiva en la personalidad del niño una situación de este talante; la comunicación debe ser amable, clara, rica en sonidos, melodías, canciones, gestos, en involucrarlos en el fantástico mundo del lenguaje y sus aplicaciones cotidianas. Guiar y poner límites a sus reacciones es vital, desde pequeñitos, es una forma de enseñarle lo que es aceptable y lo que no, el valor de la solidaridad, la responsabilidad y el cariño, como la confianza aparecen dentro del marco de la normatividad.

Estas insinuaciones ayudan en todas las edades, en todas las culturas, su valor se extiende más allá de los primeros dieciocho meses, es una “guía” de adaptación al desarrollo y a las preparaciones del niño, para los nuevos pasos y las nuevas etapas de su desarrollo.

Consejos que resumen lo realmente importante de las actividades cotidianas del crecimiento de los pequeños; ahora el cometer errores es parte de ser papitos y la disciplina es un área donde constantemente se está a prueba. Es una de las tareas más difíciles, y para hacerlo bien hay que tomar decisiones sensatas, claras y tomando en cuenta todo el contexto y para colmo de males eso hay que hacerlo exactamente en el mismo momento en que los papitos pueden estar cansados, frustrados, enojados o incluso avergonzados por el comportamiento de sus tesoros. Sentirse culpables no es la solución, hasta las mamitas más eficientes y eficaces, amorosas y creativas se equivocan, por eso es bueno tener presentes los errores más comunes en los que se cae habitualmente, para tratar de evitarlos.

Las librerías e Internet, están repletas de manuales, y métodos, libros, metodologías, pedagogías, además de las cátedras de las abuelitas, tías, vecinas, amigos, pediatras, pero la cuestión realmente es que no existe un enfoque único que sea efectivo para todos. Algunos niños tiemblan solamente con que se les hable fuerte mientras que a otros no les afecta en lo más mínimo. Algunos aprenden la primera vez que se les dices algo, a otros hay que repetírselo mil veces, hasta la desesperación (del adulto por supuesto), unos escuchan de inmediato, otros necesitan tiempo para gritar antes de que de que la mamita pueda hacerse oír. Y no es sólo cuestión de temperamento, es la edad y el desarrollo por el que esté pasando cada niño. La principal tarea del pequeño es retar los límites, hacer las locuras que le han dicho una y otra vez que no se deben hacer, es empezar a afirmar su independencia. Por supuesto que ninguno se quedará escuchando una larga conferencia. Un niño más pequeño necesitará una estrategia de disciplina sencilla, directa y rápida, eso sí, siempre con bondad, amabilidad, respeto, cariño; un chicos más mayorcito, es probable que responda mejor si el castigo tiene que ver con separarlo de sus compañeros de juego, por ejemplo. Lo fundamental es escoger el enfoque adecuado con respecto a la etapa de la vida en que se encuentran.

El “castigo” debe ser acorde a la falta y obviamente, el chico debe estar avisado de la norma y la sanción; jamás debe equipararse al nivel de frustración del adulto. Esto quiere decir que no hay que imponer sanciones o una reprimenda exagerada o errada solo porque el adulto está cansado y de mal humor. Hay que ser responsables y coherentes con las decisiones, por ejemplo mandarlos a su habitación toda la tarde y luego arrepentirse, pues luego la mamita recuerda que hay que ir al súper de compras!! Un buen método para utilizar sobre todo en público es decirles con el tono apropiado de voz: firme, pero no gritando y una mirada totalmente seria, pero serna y amable: “Si continuas así, ya sabes lo que ocurre”. Y si el mal comportamiento infantil no se detiene, debe haber consecuencias, a veces es bueno preguntarle a ellos mismos: “¿Qué crees que debería ser la consecuencia?” Es interesante cómo los niños a menudo llegan a un justo castigo (por ejemplo, pedir disculpas y dejar al hermano jugar con su juguete favorito por el resto del día).

Es importante recordar como una premisa verdadera, que se sanciona la acción y se elogia al niño. Y por supuesto aquí hay que traer al ejemplo, total él es mejor maestro!!

Con Caricias Calientitas

lunes, 18 de febrero de 2013

MOVIMIENTOS PARA LA FELICIDAD




Como siempre una breve definición, un movimiento,  un reflejo es una reacción muscular involuntaria que responde a cierto tipo e estimulo. Son sensaciones o movimientos que producen respuestas musculares concretas. También hay que decir que los movimientos o  reflejos están ligados al desarrollo neurológico.

Algunos reflejos que son propios de la infancia se disipan a medida que el niño crece, otros permanecen a lo largo de la vida. El carácter de un reflejo infantil a destiempo en la edad, puede ser señal de que algo anda mal en el cerebro en el sistema nervioso central. Es más los primeros movimientos del bebé son “reflejos”.

Los bebes se caracterizan por tener varios reflejos: Moro, succión, sobresalto, y marcha automática, como quien dice hacen movimientos de caminar cuando las plantas de los pies tocan una superficie dura. Existen otros reflejos infantiles: El reflejo tónico del cuello, es el movimiento de la cabeza hacia un lado cuando el cuello está en posición de cara. El reflejo de presión: que aparece cuando el niño tiene en su mano, en la palma un dedo del acompañante o un objeto, inmediatamente su manito se cierra, y este reflejo en los bebés es mas arraigado, solo basta con poner el dedo índice en u manito. El reflejo de búsqueda, es cuando se le toca la mejilla, seguidamente el niño busca hacia ese lado hace movimientos de succión, y voltea la cabeza, cree que llego la comida. El reflejo paracaídas, es notorio en pequeñines más grandecitos, si sostiene el pequeño posición erguida y se le hace rotar suavemente, un poco como si se estuviera cayendo, rápidamente extiende los bracitos como para interrumpir la caída y este reflejo sucede mucho antes de que empiece a caminar. El reflejo gateo que por cierto otro vez será que se hable de gateadores para la felicidad.

Los reflejos a continuación son los que perduran en la vida madura: Parpadeo, tos, nauseoso: viene de nauseas, es malucongo; estornudo, bostezo, hay que decir que se cree que las personas bostezan por hambre y no, es porque el cuerpo necesita oxígeno adicional.

Para los niños felices es vital fundamental que se chequeen todos sus reflejos, pues su ausencia manifiesta puede o es un síntoma de alarma. Hay que tener en cuenta que el desarrollo motor de los niños avanza desde la cabeza hacia los pies, y conocer algunos parámetros universales de desarrollo adecuado como: Control de la cabeza: 3-4 meses, posición sentado, más o menos entre 5 y 6 meses aunque hay los mas habilidosos que terminando el cuarto mes ya se empiezan a sentar; gatear entre los 8 y 10 meses merece un “Gateadores para la felicidad” es un tema con mucha tela que cortar; los solitos… que maravilla puede ser entre los 9 y 11 meses, sostenerse de pie solito, aquí viene la lluvia de dulces halago y celebraciones , caminar ayudado es relativo pero va desde los 10 meses hasta los 12, y caminar solito, descubrir el mundo también es relativo va desde los 10 meses hasta los 13, es el ritmo de cada uno, obviamente la estimulación adecuada con amor y mesura es importante. Corretear, entre los 18 y 22 meses.

Cuando llegan al segundo año, cuando son seductores, son como regaderas de picardía mezclada con ternura y una sobredosis de curiosidad, el control de las piernas es más riguroso, caminan hacia atrás, hacia los lados, como a los 2 años y medio su gran aventura las escaleras! Como a los 4 años y a los 5 son maestros de salto.

Los reflejos también tiene que ver con su motricidad fina, que tiene 2 etapas marcadas, la simple, solamente tocan, la prensión palmar es más de investigación, curiosidad, alrededor de los 6 meses maneja los objetos golpeándolos contra superficies y entre sí, aquí hay que estar pilas los educadores de la felicidad, porque aun sus movimientos son bastante bruscos y pueden golpearse la carita con facilidad, por eso es importante que tengan juguetes o sonajeros adecuados en tamaño, forma y textura. Más adelante entregan objetos y por ahí a los 2 años el niño una destreza creciente en el control de sus manos siendo capaz de girar el pomo de la puerta, abrir un bote, lavarse y secarse las manos (2 años), ayudar a poner la mesa, imitar la construcción de un puente (3 años), abrocharse (4 años), atarse los cordones de los zapatos (5 años). Igualmente hay un gran avance en el terreno de la motricidad fina que se ejemplariza en el uso que hace de crayolas, colores, plastilina.

Existen infinidad de rimas, canciones, cuentos, que ayudan a ejercitar, a estimular al pequeño para que supere adecuadamente los reflejos que deben quedar atrás; como siempre es esencial el contacto con el pediatra, de igual manera los criterios de cuidado y estimulación deben ser unificados entre aquellas personas que pasan la mayor parte del tiempo con el pequeño, pues de lo contrario va a tener muchas des-coordinaciones  pues la abuelita le da miedo que gatee, en el jardín lo dejan gatear, y en su casa de pronto no hay el espacio ni las condiciones entonces ¿¿?¿?¿

Hay reflejos condicionados o enseñados, por ejemplo que rico enseñarle a sonreír siempre, inventarle rimas: Los bebé comen, duermen y se sonríen. O hay un niñito muy lindo y ese eres tu, también que mande besitos voladores al papito y a la mamita, preguntarle ¿cómo amaneció el bebé más lindo? Y que conteste con una sonrisa acompañada siempre de la palabra feliz!!

Con Caricias Calientitas

lunes, 11 de febrero de 2013

TÍAS PARA LA FELICIDAD


Las tías son sinónimo de dulzura, sabiduría, ternura, paciencia, complicidad, caricias, delicias culinarias, pero cuando ellas son las encargadas de cuidar a los niños, jamás se le debe delegar como una responsabilidad de carácter obligatorio, pues un hijo es responsabilidad de los papitos. Las tías según los papitos no tienen nada más que hacer que estar cuidando los sobrinos, pues aquí cabe recalcar que las tías tienen otras actividades  que demandan mucha energía, las tías son más alcahuetes  que otra cosa. 

Todos los niños deberían tener una tía, ojala como la recién estrenada pulguita, especialmente una tía que no vea tanta tele, porque ellas son las únicas que parecen tener tiempo para los niños, es ventajoso que ellas sean las supervisoras de las cuidadoras, pues es alguien de confianza, y hay que decirlo, no los maltratan, sin embargo, deben establecerse límites, los psicólogos afirman que, por el derecho que les dan los afectos se sienten con la potestad de participar en la crianza de los sobrinos,  por eso las tías como la pulguita son ideales,  se  entrenan en el arte de amar con dulzura, de  ser cómplices en la felicidad, las tías deben   acatar las normas de hogar  de sus sobrina, normas que  deben ser uniformes con respecto al hogar del pequeño, pues las tías tienden a ser permisivas; es también aconsejable que los papitos pasen tiempo con sus hijos, para no delegar demasiadas funciones y decisiones en ella. Una manera de lograrlo es estar pendiente a lo largo del día. Es clave llamarlos varias veces desde la oficina y compartir tiempo a la llegada a casa.

Otro consejo para los papitos es ser considerados con las tías excesivamente colaboradoras,  hoy en día se sabe,  que algunas tías se convierten en esclavas, y aceptan muchas obligaciones, impropias para su situación, aunque su ayuda es fundamental, también debe tenérseles consideración, pues ya no está en sus manos el papel de la crianza. Las tías  no deben tomar grandes decisiones, ni encargarse de aspectos de la crianza que les corresponde a los papitos. Lo ideal es buscar un equilibrio entre las responsabilidades y sus capacidades.

Tías  hay de todo tipo, desde las que consultan todo, todo, todo, antes de hacer (y entonces te llaman al trabajo unas 42 veces en la mañana para ver si le ponen la camiseta blanca o la celeste) hasta las que están absolutamente convencidas de que su verdad es la verdad. Y hay tías como la Pulguita, suaves, prudentes, respetuosas, colaboradoras  sin excesos, hay tías que son muy valerosas en la vida de sus sobrinos, y como por lo general son bastante consentidoras y se toman el rol de salvadoras únicas cuando los papitos no complacen todos los antojos del pequeño, aparece un error frecuente que finalmente les quita autoridad a los papitos, y torna a los niños engreídos, caprichosos e intolerantes, actitudes que distan años luz de la felicidad. Debe quedar claro y establecido que la crianza de los hijos les compete exclusivamente a los papitos; si éstos por ocupaciones laborales no pueden dedicar el tiempo necesario a educar a sus hijos, entonces las tías pueden cubrir esa ausencia temporalmente, concertando con los papitos sobre los modos, estilos y obligaciones que toda crianza demanda y nunca ejecutar lo contrario a lo establecido.
Las tías como la Pulguita, que consientan, mimen, cuenten cuentos empitucados, canten nanas, acaricien, pero guardando las distancias en cuanto a crianza se refiere.

Con Caricias Calientitas.