lunes, 10 de mayo de 2010

SIN MIEDOS PARA FELICIDAD


Empecemos por aclarar, que los miedos se definen como, un sentimiento natural. Aquel que nunca haya tenido miedo, no ha vivido. Los miedos son sentimientos naturales en la vida de cualquier ser vivo, son respuestas necesarias frente a situaciones que sentimos como peligrosas. No sólo están aquellos que traemos ancestralmente sino aquellos que están directamente relacionados a la experiencia e historia personal. El miedo como el amor, es un sentimiento presente en todos que puede expresarse y sentirse.
El miedo a la oscuridad, el miedo a los monstruos o el miedo al agua son miedos comunes pero también hay miedos que cambian a lo largo de la vida según las experiencias vividas. Todos los niños pequeños sienten miedos porque estos son sentimientos naturales que traen desde que nacen. Lo importante es observar el grado y la persistencia de los mismos. Pero a simple vista el miedo no es un sentimiento negativo sino todo lo contrario. Conservar algún sentimiento de temor o alerta especial frente a situaciones que lo puedan poner en riesgo y tener respuestas apropiadas frente a ellas, sin que interfieran en la vida cotidiana, es positivo. Un miedo es una manera de estar alerta ante situaciones de peligro, de ir por la vida tomando recaudos. Una persona que no siente ningún tipo de miedo o de temor, cruza la calle sin mirar sin viene un auto. De alguna manera, el miedo es un sentimiento protector, tanto en el niño como en el adulto, la forma en que logre manejar los miedos y superarlos está directamente relacionada con la personalidad y el modelo ejemplo de los adultos que mas comparten con él. Es por ello que la contribución de los papitos en la formación de niños con autoestima alta y confianza en sí mismos, niños que puedan expresar sus miedos y sentir que los sostienen y que les brindan seguridad puede ser la manera de conservar esa alerta positiva y protectora y lograr que esos miedos no interfieran en la vida cotidiana.

En los chicos ya desde bebé hay determinadas situaciones que le producen miedo. En los bebés por ejemplo, un ruido fuerte puede sorprenderlo y le puede producir una situación de ansiedad, podría ser miedo, o simplemente “se asustó”, igual esa reacción genera adrenalina. Cuando los chicos van creciendo, otros miedos más o menos generales son el miedo a la oscuridad, a las máscaras, a los monstruos, a las tormentas, a los animales, al coco, a los payasos. La función de los papitos es comprenderlos y ayudarlos con amor paciencia y mucha serenidad a transformar una situación que les puede producir pánico en una situación manejable.

Convivir con los miedos de los chicos es un miedo que enfrentan los papitos, cómo enfrentarlos, hasta convertirlos en los modelos familiares y con las historietas simpáticas, honestas, respetuosas; los chicos en un principio no saben discriminar la fantasía de la realidad. Es tan frágil el umbral entre fantasía y realidad en los miedos que cuanto más pequeños todo aquello que llega de parte de sus papitos es creíble, es de verdad. Ya sea el Ratón Pérez o el Niño Dios, son cosas en las cuales los chicos quieren creer. Pero así como los papitos pueden inculcarle cosas agradables en las cuales creer, pero también esta el factor ejemplo que también le inculca miedo, por ejemplo una mamita que le teme al mar es casi seguro que sus hijos heredaran ese miedo aunque ella ni lo mencione es el ejemplo. Algunos papitos utilizan erróneamente personajes para amenazar y hacer cumplir tal o cual orden, por ejemplo, el policía te lleva, ya voy a llamar al loco, y en ocasiones traen a colación personajes siniestros sin rostro, sin identidad como el coco, y este tipo de miedos lo que hace es someter al niño y generar una situación de mucha dependencia, por favor papitos se trata es de darle elementos para el chico sea autónomo y que pueda enfrentar situaciones.

Los miedos más peligrosos son los miedos invisibles, los miedos que no se ven y se aprenden: el miedo al castigo, al fracaso, a equivocarse. Estos son los miedos de los grandes pero se construyen en la primera infancia. “Papá, mamá: ayúdenme” El miedo es una defensa hacia algo de la realidad, es una amenaza grande, es un mecanismo que se pone en funcionamiento cuando la capacidad intelectual del chico no es capaz de racionaluizar, por eso, hay que acvompañarlo, comprenderlo, darñle serenidad, brindarle confianza, afecto, la función de los papitos no es evitar que un chico sienta miedos porque los miedos son inevitables sino buscar la manera de ayudar a reconocer esos miedos, a validarlos, no descalificarlos, darles valor, ni minimizarlos ni abrir un juicio de valor sobre eso que el niño siente. Buscar la forma de ayudarlo para que vaya desapareciendo ese miedo, para que disminuya.

Por ejemplo un chico le tiene miedo a las tempestades, pues lo lógico es apartarlo de la tempestad, pero hay quienes ejercen unas ayudas contradictorias, como sacarlo a la lluvia para que experimente que nada pasa, o peor aun, cuando el chico no come lo llevan a un hospital infantil para que vea lo que le va a pasar!! Por favor! En cambio a ese mismo chico la mamita o el papito dice ‘Quédate tranquilo mamita va a estar al lado tuyo y cada vez que haya un trueno le vamos a inventar un nombre feo, le está brindando la confianza y la seguridad que el chico necesita para superar ese miedo.

La palabra dulce, amable, segura, tranquiliza y apacigua los miedos y es bueno emplearla para compartir y comunicarse, aunque, por parte de los hijos, sea a media lengua, e indudablemente la situación más difícil es cuando los adultos se asustan con los miedos de sus hijos. Un miedo compartido es doble miedo,¿cómo ayudar al niño si el papito o mamita también tiene miedo a la oscuridad o la noche?, el adulto se siente tan vulnerable y tan niño como el niño entonces es muy difícil sostener un hijo cuando se esta en igualdad de condiciones que el chico. Lo mas seguro es que se angustie y en vez de ayudarlo a que lo pueda vivir con tranquilidad, se enoje o lo minimice pero a veces eso también es producto de la propia angustia del adulto. Hay que buscar procedimientos creativos amables, respetuosos, simpáticos, que ayuden al chico a poder aceptar que tiene ese miedo y a saber que no corre ningún riesgo y papá o mamá van estar con él hasta que el miedo se “vaya”, jamás por ningún motivo subestimarlo ni ignorarlo.

Todos los seres humanos tenemos algunos miedos, la intensidad con que uno los vive depende de cómo se resolvieron en la primera infancia. Según como se resuelvan estos miedos se van a instalar como conductas permanentes en los chicos, por eso hay chicos más miedosos que otros, depende de cómo los papitos los ayuden a enfrentarlos a lo largo de su crianza. Los miedos son comunes en la infancia y los papitos sienten más miedo por verlos fuera de sí. Los chicos están observando a los adultos y, posiblemente, según sea su manera de reaccionar, despliegan su angustia en mayor o menor grado. Es conveniente cuando los chicos ya están mas grandecitos buscar “antídotos” anti-miedos; cerrar las puertas de los clósets por ejemplo, ordenar el cuarto así los miedos no vienen, es buscar alternativas para fortalecer su yo, lo que no significa eliminar los miedos, pero sí que aprendan a convivir con ellos.

Ahora, los miedos aparecen y desaparecen en los niños, sin desconocer que algunos miedos llegan a ser perjudiciales al desarrollo del niño, sin embargo hay otros que incluso, pueden hacer que el niño evite algún accidente: Por ejemplo: miedo al cruzar una calle, miedo de caerse del columpio, miedo a los animales, etc. Son miedos que enseñan al niño a ser más precavido en situaciones que exigen más cuidados. Según algunos investigadores, los miedos aparecen y desaparecen, y a veces sin darnos cuenta de ello. Y cambian a la medida que el niño va creciendo. Los niños empiezan a tener miedo a las personas extrañas, a objetos raros, a los ruidos fuertes, a la oscuridad, y luego empezarán a tener miedo a la muerte, a los monstruos, a los ladrones, etc. Muchos de estos miedos se ven inducidos por el ambiente externo como las películas, los cuentos, las historias de los amiguitos, y otros están fundados en experiencias negativas en casa o fuera de ella, y de hecho pueden servir a los papitos como alarma para identificar situaciones de algún maltrato o abuso a su hijo.

Uno de los miedos más habituales en los niños pequeños es la angustiosa separación de sus padres, el miedo al abandono. Cuando su mamita lo deja en una guardería o con otra persona y se marcha, el bebé o el niño no saben cuánto debe esperar para volver a verla. Y ahí aparece el miedo a la pérdida definitiva ya que el niño no tiene la capacidad de medir el tiempo. Pero a medida que el niño madura va conociendo con más profundidad la realidad, y así superará sus miedos. Y no se puede acabar con todos sus miedos porque estos también les permiten entender el mundo y a sentirse mas seguros en su habilidad para luchar contra el miedo.

La formula mágica de siempre, amor, cariño, dulzura, comprensión, confianza, serenidad, amabilidad, lenguaje claro y asertivo.

Con Caricias Calientitas

DECÁLOGO CONTRA EL MIEDO INFANTIL. EDUCA POSITIVAMENTE, UTILIZANDO ELOGIOS Y PREMIOS EN LUGAR DE AMENAZAS.

7 comentarios:

  1. Un video que ilustra de manera creativa como combatir el miedo!!

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  2. Que bien has tratado el tema de miedos, los niños son muy susceptibles y hay que hacerlos sentir protegidos.

    Gracias Tita.

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  3. Tita, me ha encantado el Post, muy Educativo desde luego, sobre todo para los papás,...aquí se ha usado mucho por parte de los padres lo del "hombre del Saco", "el coco",...y alguno más que no recuerdo. Y si es verdad que a veces se minimizan los miedos de los niños ó se ignoran y no debe ser así porque entonces la vez siguiente que el niño tenga un miedo no se atreverá a contarlo; también es verdad que los miedos se heredan ó se pasan de padres a hijos ó de madres a hijas, a mi me hace gracia mi madre porque en unas ocasiones minimiza mis miedos como si no tuvieran importancia y luego otras veces es ella la que intenta meterme a mi miedo con cosas que no son siquiera para tenerle,...en fin, lo que decía un Post muy Adecuado para papis y mamis...
    La Canción, no la conocía y me ha hecho reir mucho.
    Besos desde Avila y Gracias por visitar mi blog
    mariaje15

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  4. Que buen post Tita estamos de acuerdo con la formula mágica.
    El tema del miedo desde niño la ayuda ha enfrentarlos.Genial
    Riso abrazos maditerraneos
    Buen fin de semana

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  5. Querida Tita: No sabes como y cuanto aprecio todos tus comentarios a mis entradas, eres la unica que me deja su opinion y agradezco todas tus visitas. Ahora estoy leyendo tus magnificos BLOGS y todos los temas interesantes que tocas. Ya te voy dejando comentarios. Desde Miami y sin medir distancias, quien de hoy en adelante se convertira en una de tus tantas lectoras. Un abrazo calentito para quien acaricias el alma de sus cientos de lectores.
    Mary Elizabeth (Mariangeles)

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  6. Sin duda, uno no puede pasar desarpecibido por tu blog y tus reflexiones. Una gran fuente interior. Saludos. Siempre un placer.

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  7. Me ha encantdo tú entrada. Muy instructiva.
    FELIZ DOMINGO.
    Un saludo.

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