domingo, 11 de enero de 2015

ALCOBAS PARA LA FELICIDAD

Muchos expertos infantiles, afirman que desde la primera infancia, se debe tener su propio espacio. Su propia habitación o, si ello no es posible porque la vivienda es demasiado pequeña, por lo menos de un rincón sólo para él.

Por razones obvias el espacio destinado al menor, debe permitir una buena vigilancia por lo que conviene que se encuentre relativamente cerca de la habitación de los papitos, y en lo posible alejada de las zonas más ruidosas de la casa como por ejemplo el salón en el que suele encontrarse el televisor o el equipo de música, igualmente cálida de afectos y fresca de clima; soleada, luminosa, y aireada, se puede encargar al sol de mantener la temperatura adecuada, el uso de calefacciones puede resecar excesivamente el ambiente, así que no es mala idea aportar un extra de humedad para compensarlo, y un aire acondicionado, en la mayoría de los casos no es adecuado, y el ventilador en climas calientes debe refrescar el ambiente, jamás debe estar en dirección directa al niño. Cualquiera que sea el clima hay que ventilar la habitación con frecuencia para renovar el aire.

La habitación no necesita demasiados muebles, es más casi es mejor así ya que
se favorece la limpieza y evita zonas donde se acumule el polvo. ¿Qué muebles son los realmente imprescindibles? La respuesta dependerá un poco de cada uno. Una cuna, obviamente, va a ser casi lo único imprescindible. Resulta también de gran interés una cómoda con cajones, o puertas, para guardar algo de ropa, y los objetos para el cuidado del niño, una canasta para sus juguetes, que sea segura y que el niño pueda manipular a su antojo desde que empiece a gatear. Si es posible para cambiar los pañales es ideal en el baño, si es posible. Como el niño cuando empieza a gatear quiere coger todo, metérselo a la boca, entonces hay que dejarle en su canasta de juguetes objetos seguros, limpios, sin llegar a extremos, pues hay mamitas que hierven los juguetes y resulta que guardadas las proporciones, se debe permitir un “pilin” de vitamina M, es un poquitititico de mugre, solo así el niño crea defensas, si vive en un medio donde la asepsia supera los quirófanos va a ser un chico débil. El piso en lo posible debe ser lavable, y bueno los colores suaves, dulces armónicos, móviles musicales, que rico un rincón de cuentos, existen hoy en día cuentos de materiales asequibles para todos los tamaños de la primera infancia, los hay lavables para bebés, de tela, incluso para aprender labores como abotonarse, amarrar los zapatos, subir una cremallera en fin..

A la hora de dormir, los chicos pueden tener una luz tenue, mientras dominan el sueño, incluso un móvil suave, amable, un peluche, y desde pequeños acostumbrarlos a oír un cuento, si es bebé una pequeña canción. Para vigilar al niño en su espacio sobre todo en la noche, existen unos aparatitos modernos que le permiten a los papitos estar al tanto de su estado sin necesidad de estar en la habitación, los hay sencillos y muy sofisticados.

El espacio asignado desde la primera infancia, requiere como todo ser pensado en niño y desde el niño, por ejemplo ya se mandó recoger la absurda idea que niños azul y niñas rosado.. por favor, los colores de la alegría, de la ternura son todos, obviamente en pasteles, mas suaves; claro que eso va en gustos, cuando los chicos están mas grandes que opinen, que participen activamente de la decoración de su espacio. La iluminación debe ser natural y en las noches ya decía una lámpara pequeña y la luz central del cuarto, las cortinas son un tema importante, o persianas, en fin, pues al amanecer para nadie es grato un rayo de luz o de sol directo, además fomenta la intimidad y el respeto por la dignidad del pequeño. Olvidaba el famoso mosquitero en climas calidos, por favor de tul bien pequeño, claro, y que no represente peligro, pues el niño puede enredarse en él. En el diseño del espacio para el niño hay una formula mágica, sencillez + amor + creatividad + alegría igual felicidad!!!!

Ojo con los colchones, en lo posible lavables, es mas higiénico y de látex se
acomoda muy bien al cuerpo del pequeñín. Nuevamente recalcar que su espacio debe ser cálido, agradable, estimulante, cómodo... Un espacio en el que se sienta protegido y acariciado, por lo tanto es necesario que sea extremamente seguro. Usar pinturas no tóxicas, muebles con bordes redondeados, protectores de enchufes, de cajones, de puertas y ventanas, además de cubre radiadores. Guardar bien los medicamentos, las pomadas, y otros materiales que se pueda llevar a la boca. Evitar objetos de cristal, de cerámica, u otros que puedan romperse y dañar al pequeño. Todo cuidado es poco a la hora de protegerlo. Es importante y esencial, vital, que la habitación no esté sobrecargada de cosas, de peluches, y otros objetos decorativos. En los primeros meses, es mejor evitar las alfombras, atrapan mucho acaro y tierra, lo cual puede provocar alguna alergia.

Espacios para la felicidad, se construyen con amor, dedicación, y mucho respeto por la diferencia.

Con Caricias Calientitas. 

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